Tras su lanzamiento en 2017, el Porsche Cayenne ha sido renovado constantemente. La actualización de su tercera generación llegará al mercado con mejoras significativas en sistemas de propulsión, chasís, diseño, equipamiento y conectividad. “Es una de las actualizaciones de producto más importantes en la historia de Porsche”, dijo Michael Schätzle, director de la gama Cayenne. Además de reorganizar la oferta de motores, los ingenieros del Centro de Desarrollo de Weissach están realizando importantes modificaciones en el sistema de chasís del Cayenne. El objetivo es lograr un margen aún más amplio entre la deportividad en carretera, el confort en largas distancias y la capacidad todoterreno.
Para ello, el Cayenne contará, entre otras cosas, con un nuevo chasís semiactivo. Además, los conductores y los pasajeros disfrutarán de un nuevo concepto de visualización y manejo, ampliamente digitalizado y con funciones de conectividad mejoradas. La innovadora tecnología de iluminación de los faros HD-Matrix LED hace más cómoda la conducción y aumentará la seguridad en el nuevo Porsche Cayenne.
Con tantas tecnologías nuevas, ha sido necesario realizar pruebas complejas para poner a punto el auto de la mejor manera posible. La mayoría de los componentes son desarrollos completamente nuevos. “Estamos sometiendo al nuevo Cayenne a un programa de pruebas completo y exhaustivo, como si lo hubiéramos diseñado desde cero”, dijo el director de pruebas, Ralf Bosch. Además de las simulaciones virtuales, que cada vez son más precisas, las pruebas en condiciones reales siguen siendo una prioridad para Porsche.
Son estos tests finales los que determinan si un modelo nuevo está listo para su lanzamiento. Su objetivo es garantizar la estabilidad operativa y la integración funcional de todos los componentes, en situaciones más exigentes de lo que habitualmente experimentan los clientes. Los vehículos completarán dentro de pocas semanas más de 200 000 kilómetros en calles con tráfico urbano, carreteras secundarias y autopistas.
Para simular condiciones extremas, los prototipos también viajaron por todo el mundo con el objetivo de poner a prueba su calidad y fiabilidad en distintos escenarios. En el caso del nuevo Cayenne, las pruebas fueron realizadas en Asia, África, Europa y Norteamérica. En total, los prototipos recorrieron más de cuatro millones de kilómetros. “Le exigimos lo máximo al Cayenne, algo que muchos usuarios nunca harán. Por eso, el nuevo modelo fue sometido a duras pruebas todoterreno en España, atravesó complicadas dunas en Marruecos y superó con éxito recorridos altamente dinámicos en pistas de hielo en Finlandia y en circuitos de asfalto, entre ellos el mítico Nürburgring Nordschleife”, dijo Dirk Lersch, quien dirige el equipo de montaje y pruebas de prototipos del Cayenne. “Cualquiera que compre un Porsche debe saber que puede soportar esfuerzos excepcionalmente grandes, independientemente de la superficie por la que circule”.
El estreno del nuevo Porsche Cayenne está programado para el segundo trimestre de este año.
