Antes de su primera aparición en el Porsche Arena de Stuttgart, la británica de 19 años habla en esta entrevista sobre las ganas que tiene de jugar el torneo, sobre su amor por Porsche y el automovilismo y cómo se siente de ser una embajadora de Porsche.
Emma, ya has estado en Alemania varias veces. ¿Qué cosas puedes recordar?
“Todavía puedo recordar que chapoteé en las fuentes frente a la Catedral de Colonia. Estábamos visitando el Rin y el valle del Mosela. Más tarde gané un evento junior en Düren y luego un torneo en Hamburgo en 2017. Así que tengo buenos recuerdos de Alemania”.
Harás tu debut en el Porsche Tennis Grand Prix. ¿Con cuántas ganas lo estás esperando?
“Estoy ansiosa de jugar mi primer torneo de la WTA en tierra batida. Es bueno que sea el Porsche Tennis Grand Prix. He estado siguiendo el evento desde que era muy pequeña y para mí siempre fue el torneo donde el ganador se llevaba a casa un Porsche. Eso era algo único que se ha quedado en mi mente. Desde que hago parte de la gira mundial de la WTA, he oído muchas cosas buenas sobre el Porsche Tennis Grand Prix. Sé que es uno de los torneos más populares del calendario, lo cual no es de extrañar: ¿quién no quiere ganarse un Porsche?
Con nueve jugadoras del Top 10, el torneo tiene un cuadro extremadamente fuerte. ¿Hasta qué punto te motiva una competencia tan exigente?
“Será un gran desafío, pero ya he ganado partidos contra algunas de estas jugadoras en mi corta experiencia en la gira. Sería muy motivador agregar más victorias contra las mejores jugadoras del mundo, especialmente en tierra batida, donde tengo poca experiencia, ya que en realidad no hay canchas de tierra batida en el Reino Unido. Esta temporada de arcilla con el Abierto de Francia como punto culminante será un desafío interesante, así que estoy deseando que llegue”.
Si el tiempo lo permite, ¿harás un recorrido de compras por Stuttgart o visitará el Museo Porsche?
“Definitivamente el Museo Porsche está por encima de las compras en mi lista de prioridades si es que llego a tener algo de tiempo libre. O incluso visitar la fábrica de Porsche”.
Eres una gran aficionada a los deportes de motor. ¿Qué te gusta de ellos?
“Creo que es una actividad muy divertida y me encanta la sensación de ir rápido y correr: la aceleración extrema y el frenado fuerte. Pero también estoy interesada en la mecánica y la ingeniería”.
Entraste en contacto con el automovilismo a temprana edad.
“Empecé a conducir karts cuando tenía seis años y esto me hizo sentir diferente a otras niñas y niños de una manera muy especial y positiva. Mucho más agradable. Me empecé a divertir mucho más cuando comencé a ser buena y confiar en mis habilidades. Más tarde, el motocross fue un paso más allá del desafío del karting. Pero también muy divertido ya que, seamos honestos, ¿a qué niño no le gusta ensuciarse en el barro?
¿Hay similitudes entre el automovilismo y el tenis?
“El automovilismo se trata de mejorar continuamente. Eso es lo que yo amo. Y tiene similitudes con el tenis. En la cancha, también tienes que estar siempre concentrado y tienes que reaccionar instintivamente a las nuevas situaciones para encontrar soluciones rápidas. Uno invierte mucho tiempo y esfuerzo preparándose y practicando para conseguir pequeñas mejoras. Pero las diferencias en los deportes de motor son mucho más mínimas que en el tenis, ya que estamos hablando de milisegundos contra segundos. Y hay otra gran diferencia: las consecuencias en el tenis no son tan graves cuando te equivocas”.
¿Cómo eres en la vía? ¿Qué tipo de conductor eres tú?
“Diría que soy una conductora muy segura y bastante decente que disfruta ir rápido cuando los límites de velocidad lo permiten. Cuando estoy en casa, conduzco tres horas diarias para ir a entrenar. En mis viajes, no puedo conducir muy a menudo, ya que todavía soy demasiado joven para alquilar un automóvil”.
Porsche compite principalmente en carreras de resistencia y Fórmula E. ¿Qué carreras te gustaría experimentar en vivo en la pista?
“Las carreras de resistencia son como un partido largo y apretado de tres sets donde al final todo depende de la concentración y la habilidad. También es interesante para el público. La Fórmula E también es fascinante porque es una serie de carreras de innovación respetuosa con el medio ambiente, y sé cuánto par y aceleración pueden generar sus motores eléctricos. Como los autos no son tan diferentes entre sí, la Fórmula E se presta para adelantar más que otros campeonatos. Y esa es obviamente una de las cosas más emocionantes del automovilismo”.
¿Con qué piloto de carreras te gustaría recibir una lección de conducción y en qué auto?
“Me gustaría que fuera en un 911 porque es mi favorito, o quizás el superdeportivo 718 Cayman GT4. En cuanto al piloto, Daniel Ricciardo sería mi favorito, ya que creo que sus habilidades y su estilo relajado son más divertidos y propicios para aprender y mejorar rápidamente”.
Tu Porsche favorito es el 911. ¿Por qué?
“Dos de mis antiguos entrenadores conducían sendos 911. Cada vez que me presentaba a entrenar por la mañana antes de ir a la escuela, veía sus Porsche y me asombraba. Me gusta mucho ese auto. Realmente quiero ese auto. Y luego, mientras crecía, iba a Brands Hatch y veía las finales de la Carrera Cup. Cada generación del 911 es única y hermosa a su manera. El auto es una leyenda. Un símbolo de rendimiento, imagen y estilo”.
Ya has cumplido muchos sueños dentro y fuera de la cancha. ¿Cómo te mantienes motivada?
“Creo que siempre se presentarán nuevos desafíos y siempre restablecerás los objetivos. Personalmente estoy muy centrada en las mejoras que pueda hacer en mi juego y eso me motiva mucho”.
Recientemente te convertiste en embajadora de Porsche. ¿Cómo vives este papel?
“Ser embajadora de Porsche significa mucho para mí. Porsche es una marca que me ha fascinado desde niña. Es muy importante para mí alinearme con socios y marcas que realmente me apasionen y con las que me identifique. Porsche es ideal para mí. Creo que la asociación es increíble y, obviamente, estoy muy emocionada de ver qué tipo de cosas fascinantes podemos hacer en el futuro”.