Los ingenieros de desarrollo se enfrentaron a unas tareas complejas. Por un lado, el volumen del V8 biturbo de cuatro litros y 460 caballos métricos de potencia (338 kW) debía ser perceptible acústicamente en las frecuencias graves. Por otro lado, a revoluciones altas, los entusiastas debían disfrutar la deportividad del paquete de fuerza fabricado en Zuffenhausen –es decir, debía ser posible escuchar una banda sonora muy amplia: desde el burbujeo prometedor hasta el alegre grito de alta frecuencia. Al mismo tiempo, el pliego de especificaciones incluía estrictos reglamentos de emisión sonora, variables según los países, además de unos tubos de escape centrales visualmente atractivos.

Para cumplir con la variedad de requisitos exigidos, primero fueron separados totalmente los tramos de los gases de escape de las dos bancadas de cilindros. Y es que los acoplamientos, los llamados puntos de diafonía, comportan necesariamente atenuación. Para que el sonido del V8 se pueda desarrollar conforme a las revoluciones, al voluminoso silenciador final le fue otorgado un complejo control.


Cuando las revoluciones son altas (color rojo) la corriente de gases de escape fluye directamente hacia el entorno, tan solo mínimamente amortiguada. El resultado son tonos altos y agresivos que recuerdan a un auto de carreras. A bajas revoluciones (color blanco), la corriente de gases de escape toma una derivación y recorre un bucle adicional a través de las cámaras, acústicamente sofisticadas, del silenciador final. Allí unos suelos interiores especialmente perforados generan unos graves saturados antes de que el caudal escape.

El que las corrientes de gases de escape tomen el camino directo por el medio o el bucle de derivación, no depende de un solo factor. Un control de válvula inteligente situada delante del silenciador final (K) proporciona un sonido finamente diferenciado en todas las situaciones de conducción; su conmutación progresiva es controlada automáticamente mediante los campos característicos de número de revoluciones y carga.

Después de su debut en el Cayenne GTS Coupé, el nuevo sistema de escape deportivo también estará disponible para el Cayenne Turbo Coupé y el Cayenne Turbo S E-Hybrid Coupé –cada uno en combinación con el respectivo opcional paquete deportivo de construcción ligera.

Nota

Artículo publicado en la edición número 396 de la revista Christophorus.

Texto: Heike Hientzsch

lustración: Design Hoch Drei

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