Santiago de Chile. Por más de dos décadas, Porsche Cayenne se ha posicionado como uno de los modelos más exitosos de la marca alemana. Este SUV grande impulsó a la compañía a competir en un nuevo segmento, revolucionó por su equipamiento y confort, y se transformó, tanto a nivel global como en Chile, en un ícono de innovación gracias a su equilibrio perfecto entre versatilidad y deportividad. Este modelo se convirtió en la punta de lanza que lleva el ADN de la marca fuera del asfalto.

Hace 20 años, imaginarse un vehículo de mayores dimensiones y enfocado en un segmento totalmente distinto al deportivo era un hecho impensado para los fanáticos de Porsche. Las primeras generaciones de Cayenne consideraron sólo algunas versiones, las cuales dieron paso con el tiempo a nuevas variantes, más deportivas y ecológicas. Actualmente, el buque insignia de Porsche está disponible en seis variantes de la versión SUV y Coupé: Cayenne, Cayenne E-Hybrid y Cayenne S.

“Si bien en un comienzo los clientes y fanáticos más puristas de Porsche tenían cierta aprehensión a la llegada de Cayenne, sus versátiles características técnicas lo convirtieron rápidamente en un vehículo familiar, en un robusto todoterreno y un deportivo dinámico con el ADN característico de la compañía”, comentó Vicente Díaz, gerente de Porsche en Chile. “Tras la llegada de Cayenne a nuestro país, el éxito fue rotundo porque nuestros clientes pudieron ampliar la pasión de la marca con toda su familia. Ese éxito se ha mantenido por dos décadas posicionándolo como el flagship de Porsche por excelencia”, concluyó.

Antes de que Cayenne fuera desarrollado por la marca, su fundador Ferry Porsche aseguró que, si la compañía fabricaba un todoterreno con los estándares de calidad y el escudo Porsche en el frontal, las personas no dudarían en adquirirlo. Inmediatamente después de su lanzamiento, se confirmó el éxito del SUV más grande de la marca.

Cayenne, el nuevo reto para Porsche

El auge de los Sport Utility Vehicle (SUV) comenzó a ver la luz a inicios de los años 2000 y el desarrollo de Cayenne se estuvo trabajando a mediados de los noventa con el proyecto “Colorado”. Una vez consolidada la idea de construir un vehículo polivalente sobre la línea de modelos biplaza, este proyecto quedó en manos del Departamento de Diseño y Harm Lagaay, director de esa época. De esta forma, Porsche comenzó a trabajar en el dibujo técnico de su primer SUV.

Se trataba, de algún modo, en algo opuesto al diseño de un deportivo: un vehículo más grande, de techo alto, con cuatro puertas, espacio para cinco personas y todo su equipaje. Además, necesitaba una distancia al suelo mucho mayor que la de un 911. Internamente, Cayenne se conoce con la letra E de Enduro: el primero fue el E1 y el actual disponible en Chile, el E3.

La primera generación fue todo un éxito y logró llevar su versatilidad más allá. Este modelo equipaba un novedosa gama de dos motores V8. En el Cayenne S, el recién desarrollado motor de 4.511 cc, que generaba 340 CV de potencia (335 HP, 250 kW); mientras que el Cayenne Turbo conseguía unos aún más impresionantes 450 CV (443 HP, 331 kW) con la misma cilindrada. Ambos modelos alcanzaron velocidades máximas de 242 y 266 km/h respectivamente, un mensaje importante para los clientes que contaban con modelos deportivos en aquella época.

El Cayenne de primera generación fue también el primer Porsche en incorporar el recién desarrollado Porsche Active Suspension Management (PASM). El sistema PASM se ofrecía junto con la suspensión neumática. Ajusta continuamente la dureza de amortiguación e incorpora en sus cálculos el estado de la carretera y el estilo de conducción. La suspensión neumática también fue una ventaja fuera de la carretera para el Cayenne: si bien contaba con 217 milímetros de despeje con la suspensión convencional, aumentó a 273 mm este nuevo sistema.

Para 2006, Porsche optimizó sus prestaciones en carretera al presentar el nuevo Cayenne Turbo S, el cual llamó la atención con 521 CV (513 HP, 383 kW), gracias a su motor V8 biturbo de 4.511 cc.

Nueva generación, nuevos sistemas de propulsión

Las nuevas generaciones de Porsche Cayenne consideraron el concepto de evolución y refinamiento con el fin de otorgar mejores prestaciones a cada entrega. La segunda generación fue presentada con una optimización de peso y rendimiento; para ello fue reemplazada la caja de transferencia con reductora por un sistema de tracción total con embrague multidisco. Esta segunda generación permitió a la marca incorporar en 2010 nuevos sistemas de propulsión híbridos e híbridos enchufables.

Los nuevos sistemas de propulsión ecológicos permitieron a Porsche entregar mayor deportividad con mejor confort de marcha, manteniendo las características todoterreno. Con esto, la marca sentó las bases de su exitosa estrategia de electrificación y duplicando las cifras de ventas en comparación a la primera generación. Entre 2010 y 2017, se entregaron más de 535 mil unidades.

Este éxito de ventas permitió a la marca continuar innovando y explorando en nuevos segmentos, uno de ellos el de los SUV Coupé, presentando en 2017 esta revolucionaria silueta de la mano de la tercera generación de Cayenne. Poco tiempo después, Chile tuvo la oportunidad de estrenar este nuevo modelo, reconociendo el trabajo del equipo de ingeniería y diseño alemán, quienes lograron transformar un SUV en un vehículo todavía más deportivo. El Cayenne Coupé fue optimizado para perpetuar el ADN de la marca gracias a su performance mejorada.

Esta tercera generación posibilitó la incorporación de modos de conducción orientados al Offroad, lo que mejoró las prestaciones fuera de la carretera como los modos Grava, Barro, Arena y Rocas. En 2020, Cayenne aumentó su autonomía eléctrica en la versión híbrida enchufable la cual permitía recorrer hasta 50 kilómetros en modo 100% eléctrico.

Cayenne, un éxito rotundo en Chile y el mundo

Tras su develación en el Salón del Automóvil de Paris en 2002, la recepción de los clientes confirmó la visión que Ferdinand Porsche tenía con los modelos todoterreno de la compañía. Sólo en los primeros ocho años de venta de la primera generación, la marca logró comercializar más de 276 mil unidades y en dieciocho años después, completó el primer millón de unidades fabricadas.

En Chile, se vivió una situación similar; su presentación en 2003 tuvo un gran éxito inicial, donde rápidamente los clientes se acercaron al Porsche Center Santiago para configurar las primeras unidades que arribarían poco después a nuestro país. A la fecha, Porsche ha vendido más de 2.500 unidades, lo que confirma el gran entusiasmo que generó la exploración de la marca en el segmento de los Sport Utility Vehicles.

Cayenne logró revolucionar el mundo Porsche y 20 años después, sigue superando con creces las expectativas del inicio, y su revolución dio forma al segmento de los SUV de altas prestaciones, abriendo el camino a nuevos modelos y siluetas de la marca, gracias a su equilibrio perfecto entre versatilidad y deportividad.

 

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