Dónde:
Provenza, Francia
Duración:
3,5 horas
Tipo:
Curvas rápidas y largas rectas por los fascinantes campos de lavanda en el sur de la Provenza.
Tras el final de temporada del Campeonato del Mundo de Fórmula E ABB FIA, André Lotterer está descansando en su casa de Mónaco antes de realizar una concentración con sus compañeros de equipo. El tres veces ganador de Le Mans, campeón del mundo de resistencia y de la serie Super GT de Japón es actualmente piloto de Porsche en el campeonato de monoplazas eléctricos, aportando al equipo una gran experiencia y oficio en esta nueva disciplina.
Lotterer se unió a la familia Porsche en 2017, cuando ganó un asiento en el 919 Hybrid para disputar el Campeonato del Mundo de Resistencia FIA (WEC) de ese año. Pero su pasión por la marca se remonta a muchos años atrás. El piloto de 39 años tiene una impresionante colección de modelos clásicos y modernos de Porsche, que conduce siempre que puede. Nacido en Alemania y criado en Bélgica, Lotterer encontró esta particular ruta Sunday Drive por casualidad, cuando fue a ver la que iba a ser su casa de vacaciones cerca de Luberon. La ruta recorre algunos de los paisajes más espectaculares del sur de Francia que, a principios de verano, resulta inolvidable por los impresionantes campos de lavanda característicos de la región.
"Las carreteras que salen de Mónaco hacia la campiña son muy empinadas y están llenas de horquillas", dice Lotterer, "así que lo mejor es bajar a Niza y luego subir a Fréjus. Hay muchas carreteras secundarias bonitas que puedes elegir, pero recomiendo las gargantas del Verdon, famosa por sus aguas de un azul intenso. Hice el recorrido por primera vez el año pasado y me sorprendió su belleza".
La ruta de Lotterer discurre a través de un relajado viaje de 90 minutos desde la ciudad de Fréjus, en la costa, hasta el desfiladero de 700 metros de profundidad, donde recomienda tomar una de las carreteras secundarias que bordean sus 25 kilómetros de longitud para disfrutar de unas vistas espectaculares hacia el lago de Sainte-Croix. Desde aquí, hay que dirigirse al oeste por la D952 y luego tomar la D6 hacia Valensole. Como fotógrafo aficionado de gran talento, este tramo ofrece a Lotterer el equilibrio perfecto entre paisajes asombrosos y una carretera deliciosa para conducir.
Carreteras entre los campos de lavanda
"Cuando conduje por aquí el año pasado, fui directamente de Mónaco a las gargantas del Verdon y me sorprendió lo bonito que resulta todo: las curvas de la carretera, la variedad del paisaje, el entorno y todos esos pueblecitos. Hay tramos que cortan en línea recta los campos de lavanda. Puedes conducir durante media hora sin parar a través de este mar púrpura. Es un lugar muy especial".
Aunque la temporada de lavanda en la Provenza se limita a unas pocas semanas a partir de mediados de junio, el paisaje y las carreteras hacen que merezca la pena un viaje por carretera en cualquier época del año. "El recorrido es de curvas amplias y largas rectas", dice Lotterer, "carreteras perfectas para conducir, realmente fluidas y bien mantenidas. Y, por supuesto, no hay semáforos. Todo es campo abierto con muy poco tráfico. Aquí hay algo de turismo estacional, sobre todo durante la temporada de la lavanda, pero en general el campo es muy tranquilo, nada parecido a lo que hay en la costa".
Recorridos más exigentes al norte de Luberon
El terreno también es montañoso pero sin las fuertes rampas presentes en algunas de las populares carreteras alpinas del noroeste. Sin embargo, Lotterer señala que el Mont Ventoux, que se encuentra un poco al norte de Luberon, es el lugar perfecto para un tramo más desafiante si se tiene el deseo y el tiempo para un desvío.
Cuando se le pide que seleccione el coche ideal para la ruta, Lotterer se esfuerza inicialmente por elegir entre su ecléctica flota, antes de decantarse, con lógica, por su favorito personal. "Es difícil elegir, ya que tengo varios modelos de Porsche en el garaje", dice, "pero mi favorito sigue siendo el Carrera GT. Me encanta conducirlo en cualquier lugar, pero esta carretera está hecha para él. El Carrera GT es el coche definitivo para el conductor: caja de cambios manual, sonido V10. Es un purasangre pero, aún así, puedes hacer bonitos viajes por carretera con él y no tienes que ir a toda velocidad para emocionarte. Es una elección un poco exótica, lo sé, pero es el coche que más placer me da".