Allí está ubicada la exposición Porsche Boxes, que no solo reúne coches únicos –algunos tan nuevos que todavía no se han visto circulando en España– sino que describe en atractivas estructuras metálicas historias sorprendentes sobre la marca.
En un espacio de mil metros cuadrados, de acceso gratuito y con todas las medidas de seguridad sanitaria, hay diferentes zonas de exhibición perfectamente diferenciadas, además de un foodtruck rodeado de una agradable terraza para hacer un alto en la visita.
La parte más destacada la ocupan seis coches emblemáticos colocados dentro de sendas urnas abiertas, decoradas con fotografías y textos explicativos. Tres de ellos, un nuevo Porsche 911 GT3, un 718 Boxster 25º Aniversario y un Taycan Cross Turismo, se estrenan en nuestro país, pues ni siquiera se han entregado las primeras unidades. Los otros tres tampoco son modelos fáciles de ver por la calle: un 911 Turbo S de la generación 992, el Cayenne Transsyberia que ganó aquella dura travesía y un 911 GT3 Cup de la serie 991.
En una tarima central rodeada por esas seis joyas, se sitúa un espectacular Porsche Taycan con la famosa decoración Pink Pig, unos colores que lució en las 24 Horas de Le Mans de 1971 uno de los Porsche 917 oficiales y que llamó poderosamente la atención de los aficionados. El Jefe de Diseño de Porsche en aquellos tiempos, Anatole Lapine, enfadado por una decisión de la compañía, dibujó sobre la carrocería del 917 el despiece de un cerdo con los nombres en alemán de cada porción, pero seguro que no imaginó que su idea llegara tan lejos. Hoy es una imagen icónica del automovilismo y se ha replicado en diversas ocasiones, una de las más recientes en el 911 RSR que ganó su categoría en Le Mans hace tres años.
Junto al Pink Pig, otra decoración emblemática en el mundo de la competición, la de Gulf, luce sobre un Taycan que se utiliza como photocall para que los visitantes se lleven un recuerdo gráfico de su paso por Porsche Boxes.
Un rincón especial se dedica a la gama de vehículos híbridos enchufables de la marca, los Cayenne y Panamera electrificados, que son ya las variantes más vendidas de estos modelos. La exposición de vehículos se completa con la última serie especial del Macan, el Tribute, del que se exhiben dos unidades viniladas con unos colores que todos los aficionados a las carreras seguro que recordarán: los del Porsche 917 LH “Hippie”, también creados por Anatole Lapine en 1970, y los de John Player Special, la firma que lució con fondo negro y letras doradas en coches legendarios de los años setenta y ochenta.
Para quienes no se conformen con observar esta colección de automóviles únicos y aprender detalles curiosos de la historia de Porsche y de sus avances tecnológicos, hay una actividad extra. Dos unidades del Taycan, el primer modelo cien por cien eléctrico de la marca, están esperando para invitar a un pequeño paseo a los que quieran comprobar en vivo las excelencias de este vehículo.
Y, como guiño para los más pequeños, encontramos un Porsche 911 decorado de una forma muy especial para que se lleven una fotografía de recuerdo de su paso por esta exposición única e irrepetible.