Ottocar se inclina sobre un nuevo y resplandeciente Boxster Spyder que acaba de recoger de la fábrica de Porsche en Zuffenhausen. No es la primera vez que lo hace: el austriaco va a buscar sus coches en persona siempre que es posible. "Vine la primera vez en 1977. Entonces me estaba esperando un 911 Carrera 3.0", recuerda. Hoy, 43 años después, se lleva a casa su Porsche número 80, esta vez en color azul Miami.
Para este magnífico aniversario, el equipo de Porsche Community Management unió fuerzas con el de recogida en fábrica con el fin de realizar algo muy especial: Ottocar fue uno de los primeros clientes a los que se les permitió colocar el escudo de Porsche en el capó. Las felicitaciones personales del Dr. Wolfgang Porsche, Presidente del Consejo de Supervisión, también hicieron que la ocasión fuera excepcional.
Desde la competición hacia Porsche
La historia de Ottocar con Porsche comenzó, hace casi 50 años, en el circuito. "Los Porsche simplemente me adelantaban por todos los lados", recuerda. Así que empezó a ahorrar y se compró un 911 E amarillo Speed, también conocido como el "modelo del tapón de aceite". Sería el comienzo de una pasión para toda la vida.
El piloto aficionado también se mantuvo fiel a su deporte: posee un 917, un 910 con un raro motor de ocho cilindros y un 956, sin mencionar un 904 con su motor original Fuhrmann y un 964 Cup. Todos los coches están en condiciones de funcionamiento y participa regularmente en pruebas clásicas con el 917. La corona de ganador de la carrera Ventilspiel de este año se encuentra en el vehículo como trofeo.
Un coche diferente cada día y dos en el fin de semana
El coleccionista ha tenido 80 Porsche diferentes a lo largo de su vida, incluyendo nueve versiones del Carrera RS. Hoy en día, su colección comprende alrededor de 38 coches. Como el propio Ottocar dice: "Puedo conducir uno diferente cada día durante un mes y dos los fines de semana".
El lugar donde guarda sus vehículos este coleccionista nacido en Viena es tan fascinante como los propios coches. Ha construido un edificio separado para su colección de Porsche, lo llama su "sala de estar". Los visitantes pueden pasear frente a entradas de talleres, escaparates y carteles publicitarios. Pasan por la juguetería de Ottocar, por una tienda de antigüedades y por un cine que proyecta, por supuesto, la película épica de Steve McQueen "Le Mans".
La sala también está decorada con numerosas copas, carteles, artículos, trofeos y recuerdos de carreras, eventos y encuentros del Club Porsche. Se puede ver y sentir que Ottocar está muy a gusto en ese ambiente que ha creado, que es algo así como su propio mundo Porsche.
Los vehículos están alineados a ambos lados: a la izquierda, los de carreras en orden ascendente hasta un 911 Turbo S 993 y un 911 GT2 RS 997. Los coches de la derecha empiezan con un vehículo militar Jagdwagen, un antiguo 356 Coupé con el parabrisas curvo y varios 911 antiguos: 911 RS 2.7 y una fila de 930 Turbo y Turbo-look en las variantes Coupé, Targa y Cabriolet, así como un Speedster de la serie G.
Conducir es lo importante
Por increíble que sea esta colección, Ottocar prefiere sentarse al volante que estar entre sus coches, porque conducir es lo importante para este octogenario. Sale regularmente con nueve de sus vehículos, incluyendo un 911 R, un 911 Speedster tipo 991 y dos Boxster Spyder de las últimas dos generaciones. No nombrará un coche favorito, pero elige el Boxster Spyder tipo 981 para muchas de sus salidas.
"El sonido, la forma de conducirlo, la suspensión, todo lo que hace... es el único de mis Porsche que me recuerda a mi 910", dice Ottocar, que también asiste a los eventos internacionales del Club Porsche. Él llama a esto "socialización de Porsche". Originalmente era miembro del Club Porsche de Viena, hoy en día es miembro del Club Porsche de Graz y del Club Clásico de Austria.
700 clubes oficiales de Porsche en todo el mundo
"Sin la gente, los coches son solo coches. Es la gente la que les da vida". Es exactamente este pensamiento lo que motiva a alrededor de un cuarto de millón de conductores de Porsche en todo el mundo a unirse a uno de los 700 clubes oficiales de Porsche. No importa si tienes un solo deportivo o una colección completa de Porsche en el garaje, lo que cuenta es la fascinación por la marca.
Volvemos a Porscheplatz. El coche número 80 no es de ninguna manera el final para Ottocar. Su próximo destino es una ruta proverbial: planea ir a una aventura por la carretera Panamericana en un Cayenne. "Cuando tienes 80 años, ya no piensas tanto en el pasado sino en el futuro. Esperas con ansias las cosas que están por venir", dice. Cosas como su próximo aniversario: 50 años como cliente de Porsche. "Compré mi primer Porsche en 1972, ese aniversario será el 2022", sonríe. "Así que el círculo desde el pasado hasta el presente está completo. Porque así es como empezó todo".