El 911 Turbo S de 650 CV (478 kW) acelera de 0 a 100 km/h en 2,7 segundos y alcanza una velocidad máxima de 330 km/h. Para su uso como coche de seguridad en este campeonato de resistencia, el deportivo de Weissach ha sido equipado con tecnología de transmisión de datos, un sistema especial de señalización luminosa y dos monitores adicionales en el puesto de conducción.
“La barra horizontal situada en el techo está compuesta por diodos LED que parpadean en ámbar cuando el coche de seguridad entra en acción. Si es necesario, podemos cambiar la sección central a verde”, explica Adam Kot, responsable del mantenimiento de los coches de seguridad en Manthey, socio de Porsche. El color verde indica que los vehículos que se aproximan pueden adelantar al 911 Turbo S hasta que el líder de la carrera se sitúe justo detrás. La unidad de gestión de las luces del techo y de los cuatro intermitentes está en el maletero, en la parte frontal. Para ahorrar espacio, también se sitúa ahí el equipo de radio que permite la comunicación con dirección de carrera, incluidas la fuente de alimentación y la electrónica. Este sistema notifica el estado de las banderas a lo largo del circuito.
“En comparación con los modelos de carretera, incluyen nuevos interruptores en la consola central, un botón rojo en el volante para la radio, una jaula de seguridad antivuelco y dos asientos tipo baquet con cinturones de seis puntos de anclaje”, explica Adam Kot. El safety car también cuenta con una suspensión específica para circuito. Los pilotos de los coches de seguridad para la temporada 2022 siguen siendo el portugués Pedro Couceiro y el francés Yannick Dalmas. Este último logró la victoria absoluta en las 24 Horas de Le Mans de 1994 al volante de un Porsche 962.
Los coches de seguridad, que dan la vuelta al mundo en los mismos contenedores que los dos 911 RSR del equipo oficial, prestan otros servicios en el circuito y en las sesiones de entrenamientos: en cada evento del WEC, salen a la pista para comprobar que los sistemas de radio y señalización funcionen correctamente. “Los vehículos no acumulan muchos kilómetros”, explica Adam Kot, y aclara: “De media, cada unidad recorre unos 1.000 kilómetros al año. No tenemos que hacer mucho en términos de mantenimiento: repostar y revisar los neumáticos y los frenos. Eso es todo”.
Los dos nuevos coches de seguridad, decorados en negro y rojo, estarán presentes en todas las carreras del WEC esta temporada. En las 24 Horas de Le Mans se aplicarán unas reglas especiales debido a la longitud de 13,623 kilómetros del trazado francés: allí, los safety cars salen a pista a la vez. Para esta carrera, que marca el punto culminante del Campeonato del Mundo de Resistencia en el mes de junio, Manthey prepara tres Porsche 911 Turbo S adicionales. “Proporcionar los coches de seguridad forma parte de nuestra estrecha colaboración con la organización del WEC y de las 24 Horas de Le Mans, la FIA y el Automobile Club de l'Ouest (ACO), respectivamente”, dice Alexander Stehlig, Director de Operaciones de Porsche para el WEC. “Nos alegra que, a partir de este año, veremos en acción al extremadamente potente y rápido 911 Turbo S cuando ocurran incidentes en la pista”.
Los nuevos vehículos para el ACO se entregarán en Francia en las próximas semanas. Su primera aparición en la Sarthe está prevista para los días 16 y 17 de abril, cuando debutarán en la carrera de resistencia de 24 horas para motos.