Atreverse a soñar
Célia Martin, Michelle Gatting y Rahel Frey viven su sueño como pilotos profesionales. Para ello, tienen que luchar al máximo. Con su historia, quieren inspirar a otras mujeres. Christophorus ha acompañado a las tres durante la temporada del Campeonato del Mundo de Resistencia (WEC) y ha vivido de cerca sus altibajos.
Cinco. Cuatro. Tres. Dos. Uno. Una profunda voz masculina desgrana la cuenta atrás por la radio. Ruge el motor del 911 GT3 R. Cuando Michelle Gatting pisa el acelerador, la parte trasera se balancea, pero la danesa mantiene el control del coche en todo momento. La escena recuerda al lanzamiento de un cohete de la NASA. Incluso el garaje parece el interior de una estación espacial, con su suelo gris claro impoluto. Los ingenieros están en la sala contigua sentados en sillas plegables con la mirada fija en doce monitores. Siguen cada movimiento del vehículo, analizan los datos técnicos y comparan los tiempos.
Coreografía perfecta:
en la parada en boxes, no puede fallar ni un movimiento. Las pilotos se turnan al volante.A pocos metros de allí, Ohana ha encontrado su sitio en un carro de herramientas. En un primer momento, el peluche rosa de ojos saltones parece fuera de lugar, pero el personaje de la película de Disney Lilo & Stitch es la mascota de Gatting y sus compañeras Rahel Frey y Célia Martin. «Ohana» significa «familia» en hawaiano, y eso es precisamente lo que son las tres pilotos de las Iron Dames y el equipo Porsche Manthey: una familia que ha vivido sus altibajos esta temporada.
El Campeonato del Mundo de Resistencia (WEC) es la punta de lanza del proyecto Iron Dames, en el que se promueve a un total de 16 pilotos en diversos certámenes. En la temporada 2025, Manthey se hace cargo por primera vez del proyecto en el marco de una cooperación con Porsche Motorsport.
Cohesión:
en las carreras de resistencia no puede faltar una buena química. Ohana las acompaña como amuleto (arriba a la derecha).Gatting, Frey y Martin forman parte de las Iron Dames desde hace tiempo. La suiza Frey, de 39 años, y la danesa Gatting, de 31, compiten juntas en carreras de GT desde los inicios en 2018. Junto con su antigua compañera, la belga Sarah Bovy, celebraron un éxito histórico en noviembre de 2023 al convertirse en el primer equipo exclusivamente femenino en ganar una carrera del WEC en Baréin con el 911 RSR, lo que les valió para asegurarse el subcampeonato. Dado que en el WEC se exige una composición mixta de pilotos profesionales y aficionados y que Bovy ahora ya está clasificada como profesional, Célia Martin se incorporó al grupo en 2025. La francesa de 34 años está considerada una rookie, ya que el año pasado completó su primera temporada en GT3.
Respeto ganado a base de éxitos
«Rahel, preparada para el cambio», se escucha de nuevo por la radio la voz del ingeniero Bartholomäus Pasionek. Frey extiende la balaclava sobre los rizos rubios y se pone el casco. Gatting conduce el GT3 R hasta boxes y besa con el morro la señal lollipop que le indica la posición exacta donde debe detenerse. Frey se sube al coche, el motor ruge y el mecánico levanta la señal: ¡vía libre! Cada movimiento recuerda a una coreografía perfectamente ensayada.
La pantera rosa:
en el WEC, las Iron Dames compiten con el Porsche 911 GT3 R que utiliza Manthey.
Gatting corre con el casco en la mano directamente hacia el monitor de tiempos, con el pelo rubio, que suele llevar trenzado, un poco revuelto. «Estoy muy contenta de trabajar con un equipo top», afirma. «Manthey tiene un poco más de experiencia y estructura que otros equipos, y eso es precisamente lo que marca la diferencia». Al mismo tiempo, aumentan las expectativas. Las externas... y las propias. «Recuerdo que en 2019 andaba como un ratoncito merodeando por el paddock y miraba con admiración a todos los pilotos. Ahora vienen ellos a darnos la mano a nosotras», dice Gatting. Añade que el respeto se ha ganado con éxitos.
Eso es precisamente lo que diferencia al proyecto Iron Dames de otros equipos femeninos, que la atención se centra en el rendimiento en la pista. ¿El diseño rosa? Es un extra. Antes, Frey y Gatting no habrían competido con un mono rosa bajo ningún concepto, pero hoy se alegran de que su aspecto llamativo atraiga a una comunidad de fans cada vez mayor y despierte el interés de muchas jóvenes por el deporte del motor.
El mundo del automovilismo también ha reconocido rápido la esencia de Iron Dames, es decir, competitividad en estado puro. Sin embargo, este no siempre ha sido el caso de los equipos exclusivamente femeninos, que a menudo se centraban solo en ser diferentes. «Muchas veces se destaca el mero hecho de ser mujer, no el talento», afirma Martin por experiencia propia. Las Iron Dames no quieren un trato especial por ser mujeres. En el automovilismo, al fin y al cabo, ambos sexos compiten en las mismas condiciones físicas. Tampoco quieren enfrentarse a prejuicios del tipo «Cómo no va a tener un accidente siendo mujer...».
Gran popularidad:
las Iron Dames tienen muchos fans y se han convertido en toda una marca.
Una temporada con muchos retos
En cuanto a los éxitos deportivos, la temporada 2025 del Campeonato del Mundo de Resistencia (WEC) ha sido todo un reto para el trío y lo ha moldeado. Por un lado, tuvieron que reencontrarse como unidad. En las carreras de resistencia, donde se comparten éxitos, fracasos y puesto de conducción y se pone a punto el coche conjuntamente, no solo hay que marcar un buen tiempo por vuelta, sino también cuidar mucho la convivencia. Al fin y al cabo, a veces se pasa más tiempo con las compañeras de equipo que con la propia pareja. Las tres se llevan bien, aunque son muy diferentes.
Por otro lado, al inicio de la temporada también fueron descubriendo más a fondo las características del 911 GT3 R. Tras el cambio de normativa para 2024, que pasó de los vehículos GTE a los GT3, las Iron Dames empezaron la temporada pasada en el WEC con un Lamborghini, mientras que en la European Le Mans Series consiguieron una victoria con el 911 GT3 R. «Sin embargo, en el WEC nos llevó un tiempo entender que teníamos que adaptar nuestra conducción aún más al coche», analiza Frey.
«En parte, fuimos demasiado agresivas. No hay que forzar el vehículo, sino ser paciente». Las primeras carreras del WEC en Catar, Italia y Bélgica pusieron a prueba a las tres, que no consiguieron el podio esperado.
En el tradicional punto álgido de la temporada, las 24 Horas de Le Mans, estaban decididas a aprovechar su oportunidad. Para Frey y Gatting era la séptima vez que acudían juntas a la prestigiosa clásica de La Sarthe. Gatting incluso lleva un tatuaje con el logotipo de las 24 Horas en el antebrazo izquierdo. Para ella es más que una carrera. Se había preparado durante semanas entrenando duro. Quizá fuera la carrera más importante de su vida. Era la única que había conseguido un contrato con Porsche en el marco de la nueva colaboración entre Porsche Motorsport y las Iron Dames, y corría por encargo del fabricante. Ahora quería demostrar todo por lo que había luchado durante años.
Women driven by dreams:
las Iron Dames siguen este lema, también con el diseño rosa del 911 GT3 R. Al principio les costó acostumbrarse, pero ahora lo lucen con gusto.
Doloroso revés en Le Mans
Sin embargo, el domingo a las 17:30 h todo terminaría para Gatting, y no tras cruzar la línea de meta, sino una semana antes, tras solo siete vueltas durante la jornada de pruebas, en el segundo entrenamiento. Después de la interrupción de la sesión con bandera roja, el caos se adueñó del pit lane de repente. El procedimiento fue diferente al habitual.
Gatting salió y se quedó en la puerta, esperando a Frey. En ese momento de confusión, el Porsche de 1350 kilogramos, que estaba elevado sobre los gatos neumáticos integrados, le cayó a Gatting sobre el pie derecho.
Ese fue el final de su Le Mans personal y el inicio de una época difícil. Se había roto tres huesos, y ella lo notó inmediatamente. La radiografía confirmó la triste realidad: imposible salir a la pista. «Que Sarah pudiera sustituirla fue una suerte dentro de la mala suerte», afirma Frey. Como Gatting, clasificada como profesional, no podía participar, Bovy pudo sustituirla en ese caso sin infringir las normas. La belga ya había participado cuatro veces en Le Mans y sabía bien a qué atenerse. «No esperaba correr aquí este año», declaró antes de la carrera. «Lo más importante es que lo de Michelle no sea grave. Voy a dar lo mejor de mí». Cuando Bovy se puso el mono de carreras de Gatting, entonces la danesa asimiló en su corazón lo que su mente ya sabía. No estar a bordo era más doloroso que la propia lesión. «Allí no dejé que se me notara, pero luego, cuando me vi sola en mi habitación por la noche, me puse a llorar irremediablemente. Fue el punto más bajo de mi carrera», dice con voz emocionada y hace una breve pausa. «Cuando después de la carrera Sarah me preguntó si podía quedarse con mi mono, fue muy emotivo para mí». Una semana más tarde, con muletas, observó desde el garaje cómo sus compañeras de equipo luchaban en la prueba de 24 horas. Primero, Frey se vio empujada fuera de la pista por otro vehículo y, más tarde, un fallo técnico acabó con cualquier esperanza de obtener un buen resultado.
Situación excepcional:
en Le Mans, Sarah Bovy sustituyó a Michelle Gatting por una lesión de la danesa en el pie derecho (abajo).
«Fue el punto más bajo de mi carrera». Michelle Gatting
Dos semanas y media después, Gatting se puso de nuevo al volante. En la European Le Mans Series, en la que competía además del WEC, luchó por el título junto a Martin y Bovy. Aún le dolía, pero es la fuerza para volver a levantarse lo que distingue a una excelente deportista de una buena. Las Iron Dames han reforzado más de una vez su resiliencia y su fortaleza mental en sus caminos, desde que solo eran unas niñas que soñaban hasta su actual trabajo como pilotos profesionales.
Levantarse siempre después de caer
Gatting recuerda perfectamente cómo, hace siete años, les gritó a sus padres por teléfono: «¡Nos vamos a Le Mans!». En realidad, en ese momento su carrera ya se daba por terminada. Sus padres le habían financiado un deporte tan costoso como el karting debido a que a los siete años Gatting ya se había hecho un nombre entre todos los chicos por conducir con los codos fuera. La familia incluso tuvo que abandonar su hogar para poder seguir financiando la carrera de su hija. Durante un tiempo vivieron en hoteles. En 2014, tras ascender a la Porsche Carrera Cup, se acabó lo que se daba. El presupuesto se había agotado, un destino conocido por muchos pilotos, desafortunadamente. Solo una búsqueda de talentos en la iniciativa de la FIA «Women in Motorsport» volvió a poner a Gatting en el mapa. «En aquel momento me estaba jugando el todo por el todo, era mi última oportunidad».
Novata:
Célia Martin es la novata del equipo y disputó su primera temporada de GT3 en 2024.Célia Martin también tuvo que hacer frente a más de un revés durante su carrera. Cuando quiere recargar pilas, siempre vuelve al mismo lugar: el circuito Nürburgring-Nordschleife. «Me subo al coche y doy unas vueltas», dice. «Es mi forma de meditar. Allí sé exactamente lo que estoy haciendo y eso refuerza la confianza en mí misma».
La francesa llegó más bien tarde al mundo del automovilismo. Primero probó suerte en la conducción todoterreno y, más tarde, casi todos los fines de semana peregrinaba con amigos desde su ciudad natal, cerca de Burdeos, hasta el Eifel para dar unas vueltas en el Nordschleife, hasta que decidió quedarse allí y buscó un apartamento porque, tras estudiar economía, a los 27 años se había propuesto convertirse en piloto y competir en las 24 Horas de Nürburgring. «Hoy diría que fui un poco ingenua, pero estaba totalmente decidida», dice, sonriendo y girando uno de los muchos anillos que luce.
«El Nordschleife es mi lugar de meditación». Célia Martin
Concentración total:
Rahel Frey es la más experimentada del trío y transmite mucha tranquilidad.Mientras que Martin es capaz de reírse abiertamente de sí misma, Gatting cautiva con su estilo nórdico y tranquilo. Por su parte, Frey parece ser el punto de equilibrio con más experiencia. Al igual que Gatting, empezó su carrera en los karts, como muchos otros, y fue la primera mujer en ganar la Fórmula 3 Cup de Alemania. Durante años, compitió con éxito como piloto oficial de Audi en el DTM. «Mi madre nos educó a mis hermanas y a mí para que fuéramos plenamente independientes, lo que me ha ayudado mucho en el mundo del automovilismo», afirma. «Analizo todo y me preparo lo mejor posible. Eso, unido a la experiencia, me ayuda a superar los errores y mirar hacia delante».
Esto es precisamente lo que hicieron las tres después de tocar fondo en Le Mans. En São Paulo celebraron su resurgimiento. Por primera vez en la temporada, lograron clasificarse para la sesión Hyperpole, una tanda de clasificación para conseguir la pole position. En carrera, a pesar de una penalización, se quedaron a las puertas del podio. En Austin también entraron entre los cinco primeros, pero el radiador se les atascó con suciedad de la pista y tuvieron que abandonar prematuramente.
Siempre atentas:
cuando una piloto no está en pista, siempre escucha por radio todo lo que sucede.«Mi madre me educó para ser muy independiente». Rahel Frey
Este tipo de reveses también hicieron más fuerte al equipo. Cuando se gana, todo parece fácil, pero solo en la derrota compartida sale a relucir la fuerza de la comunidad, tan importante para el éxito. «Hemos dedicado plenamente nuestra vida a este deporte», afirma Gatting, que además del tatuaje de Le Mans lleva otro en el brazo: «If you dream it, you can do it» («Si lo sueñas, puedes hacerlo»). Gatting, Frey y Martin no solo han vivido con esa actitud toda su carrera, sino que también les acompaña esta temporada. Y aunque este año no hayan logrado un gran éxito como la victoria de 2023 en Baréin, inspiran a innumerables niñas y mujeres de todo el mundo a no rendirse y a creer en sus sueños. Hasta que, algún día, puede que algunas de ellas se sienten al volante del 911 GT3 R y escuchen: «Cinco. Cuatro. Tres. Dos. Uno».
El proyecto «Iron Dames»
Éxito histórico:
en 2023, las Iron Dames hicieron historia con la primera victoria de un equipo femenino en el Campeonato del Mundo de Resistencia en Baréin.Porsche X Iron Dames, «Because every dream matters»: bajo este lema, al comienzo de la temporada 2025 se inició una estrecha colaboración entre Porsche Motorsport y el conocido proyecto para fomentar la presencia de las mujeres en el automovilismo. Aunque las Iron Dames ya habían competido anteriormente con algunos coches Porsche, ahora lo hacen en exclusiva y han intensificado su colaboración, que está previsto que dure varios años.
El proyecto fue creado en 2018 por la empresaria y piloto Deborah Mayer, porque se dio cuenta de que en el automovilismo se apoyaba muy poco a las mujeres. Su motivación era establecer la igualdad de oportunidades y demostrar que las mujeres no solo pueden competir, sino también ganar. Desde entonces, se fomenta la participación de mujeres jóvenes desde los karts hasta las competiciones GT de élite, como el Campeonato del Mundo de Resistencia (WEC). Además, pilotos del entorno de las Iron Dames también compiten en la Fórmula 1 y los rallies. Esta temporada, la alineación cuenta con un total de 16 pilotos en diversos campeonatos. Uno de los objetivos es integrar el proyecto Iron Dames con los programas nacionales de las copas monomarca Porsche y el programa central para pilotos Júnior de Porsche Motorsport. «Con las copas monomarca Porsche, se añade un paso importante en el ascenso desde los karts hasta la categoría GT internacional», afirma Franziska Baier, directora de marketing y comunicación de las Iron Dames. «Estamos encantadas de colaborar con un fabricante para el que los sueños son tan importantes como para nosotras».
La punta de lanza del programa es el Campeonato del Mundo de Resistencia (WEC), en el que Michelle Gatting, Rahel Frey y Célia Martin compiten con el equipo Manthey en un 911 GT3 R rosa en la categoría LMGT3. El experimentado equipo cliente ganó todos los títulos de la categoría GT3 en la temporada de su debut en el WEC en 2024.
En la Asian Le Mans Series, la European Le Mans Series y el campeonato norteamericano IMSA WeatherTech SportsCar, Proton Competition ejerce como equipo de competición para las Iron Dames. Gatting ascendió a piloto oficial de Porsche en el marco de esta cooperación.
Las participaciones de las Iron Dames en 2025
Campeonato del Mundo de Resistencia FIA WEC (categoría LMGT3):
Michelle Gatting (Dinamarca), Rahel Frey (Suiza), Célia Martin (Francia).
Equipo: Manthey
Campeonato IMSA WeatherTech SportsCar (categoría GTD):
Michelle Gatting (Dinamarca), Rahel Frey (Suiza), Sarah Bovy (Bélgica), Karen Gaillard (Suiza, 24 Horas de Daytona).
Equipo: Proton Competition
European Le Mans Series (categoría LMGT3):
Michelle Gatting (Dinamarca), Sarah Bovy (Bélgica), Célia Martin (Francia).
Equipo: Proton Competition
Asian Le Mans Series (GT-Klasse):
Michelle Gatting (Dinamarca), Sarah Bovy (Bélgica), Célia Martin (Francia).
Team: Proton Competition